Balenciaga inundó la pasarela en la Semana de la Moda de París
Balenciaga presentó el pasado 1 de febrero, su colección otoño / invierno en un estilo de alto apocalipsis en la semana de la moda de París , inundando deliberadamente la pasarela y las primeras filas de asientos como una declaración puntual sobre el cambio climático.
Los modelos salpicaron, a través de la pulgada aproximada de agua entubada en la pasarela negra, algunos con calcetines para el agua mientras otras desafiaron sobre la inundación con tacones de aguja. Según los informes , el director creativo de Balenciaga, Demna Gvasalia, imaginó esto como un guiño al aumento del nivel del mar, una consecuencia ya evidente del calentamiento global. Otros toques ominosos incluían pantallas LED en el techo, que proyectaban imágenes de cielos infernales y grandes chubascos. Un efecto general muy sombrío, especialmente como telón de fondo para los hombros exagerados del supervillano.
El espectáculo se llevó a cabo en el complejo de estudio cinematográfico Cité du Cinema en Saint Denis, un suburbio al norte de París. La ropa en sí mantuvo el ambiente de cosplay de Matrix prevaleciente en la alta moda en estos días, con abrigos largos y plumosos y capas espeluznantes y gafas futuristas que recuerdan a los invasores espaciales. Con el agua también corriendo sobre las dos primeras filas de asientos, los asistentes fueron relegados a la tercera fila o más atrás, como medida de protección salvándolos de las salpicaduras.
Si la idea de hacer comentarios sobre el cambio climático a través de una metáfora visual resulta algo derrochadora (el agua no es un recurso ilimitado después de todo) según los informes, Balenciaga planea devolver el agua que usó a la ciudad. La marca también donará las sillas a un centro deportivo para niños, según Footwear News . Entonces, en total, un seguimiento bastante apropiado del show de Gvasalia en París en septiembre, celebrado en lo que Cathy Horyn de Cut describió como una «arena moderna que se parecía a una asamblea gubernamental, evocaba los terrores de un mundo controlado por burócratas sin alma».
Acompañando las miradas había una película que mostraba imágenes apocalípticas de cuervos de carroña, tormentas de océanos, llamas y lava, proyectadas en el techo de arriba y reflejadas en la superficie del agua con efecto cinematográfico.
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Fuentes: thecut.com, Thespaces.com