EVOLUCIÓN: IMPRESIÓN 3D PODRÍA INCORPORAR LUZ PARA DEJAR ATRÁS LA IMPRESIÓN POR CAPAS
¿Has visto en acción una impresora 3D? En Ciluz aún recordamos el día en que tuvimos oportunidad de ver una en actividad e inevitablemente, varios pensamos en esas imágenes que tuvimos de niños acerca de cómo sería el futuro, qué artefactos existirían y las infinitas posibilidades que nos regalaría todo tiempo lejano por venir.
Todos estos tiempos lejanos han ido llegando y la impresión 3D es uno de esos anhelos pasados, mostrándonos su versatilidad y enorme potencial, basado en un grupo de tecnologías de fabricación por adición, donde un objeto tridimensional es creado mediante la superposición de capas de material, ofreciendo a los desarrolladores de productos la capacidad de imprimir partes y montajes hechos de diferentes materiales con diferentes propiedades físicas y mecánicas. Las tecnologías avanzadas de impresión 3D pueden incluso ofrecer modelos que pueden servir como prototipos de producto.
Así como la hemos conocido ya es sensacional, sin embargo, hay un elemento que se le podría sumar, que permitiría imprimir un objeto en 3D de una sola vez y no en capas como ocurre en la actualidad.
Se trata de una nueva técnica cuyo cincel es la luz, en parte inspirada en cómo trabajan las tomografías computarizadas, como los escáneres que comúnmente se practican en los centros de salud.
En eso ha estado trabajando un equipo de científicos de las universidades de Berkeley y Carolina del Norte, precisamente, en una «replicadora», descrita en un trabajo publicado hace unos días en Science. Y lo decimos así porque es como han bautizado al sistema, en honor a los dispositivos que aparecen en la saga ‘Star Trek’.
Se trata de un sistema que modela un cilindro de acrilato (una resina) a partir de la luz, de modo que según la cantidad de ésta que recibe pasa de líquido a sólido. Esto ocurre debido a que la resina absorbe los fotones y se polimeriza cuando recibe cierta cantidad de éstos (es decir, las moléculas de unen, quedando una especie de plástico)… ¡Fascinante, ¿no?!
Una vez se ha expuesto a la luz, los líquidos son desechados y queda el objeto impreso, solidificado. El proceso de exposición dura unos dos minutos para modelar un objeto de unos pocos centímetros.